miércoles, 4 de julio de 2018

San Sebastián con niños

    

     Hola ... hoy os vengo a contar la última escapada familiar. La verdad que fue corta pero  
intensa 😊. Yo salía de trabajar el viernes a las 20h., o sea que no podíamos alejarnos mucho, y decidimos alejarnos todo lo más que podíamos ... y a 4h. tenemos San Sebastián.


     Buscando hotel, qué ver, dónde comer y demás, me encontré con la página de turismo, la cual es súper completa y ofertan diferentes tipos de escapadas.


     Una de ellas era Escapadas en Familia y me pareció una idea genial y muy bien de precio. Así que me puse a investigar más sobre los hoteles que entraban en la escapada, sobre lo que valdría todo lo que entraba por separado para ver si compensaba y demás, y efecivamente compensaba, o sea que no me lo pensé más y reservé. Si que es verdad que a la hora de reservar, me fue más sencillo llamar por teléfono. Me atendieron super bien y en el momento me mandaron por email la orden para hacer el pago online y muy bien todo.

     La oferta incluía:
  • dos noches en el Hotel Silken Amara Plaza de 4 estrellas, en habitación doble con una cama supletoria, en régimen de alojamiento y desayuno.
  • bolsa Welcomo Pack con información turística.
  • Tarjeta SSCARD City Breaka: tarjeta multipersonal por habitación, válida por tres días, que ofrece descuentos y ventajas en servicios turísticos, con cuatro viajes diurnos y dos nocturnos en autobús de línea.
  • DonostiTour: Bus turístico válido durante todo un día, cualquier día de la estancia.
  • Entradas para el Aquarium.
  • Entradas para el Museo de las ciencias y al Planetario.
y todo ello por 280€!! 

     Pues como os comenté, salimos a las 20h., cenamos unos bocadillos por el camino, y en cuatro horas estábamos en San Sebastián.

     Hotel Silken Amara Plaza ****

Imagen de la galería de este alojamiento

     El hotel no está en el mismo centro, caminando son como 15 minutos, pero está muy bien comunicado y hay sitio para aparcar en la calle. Es zona azul eso si, pero por las noches, sábados por la tarde y domingo todo el día, no funciona o sea que se aparca gratis. De todas formas, el hotel ofrece sitio en un parking que está justo al lado por 19€ el día 😲. Nosotros llegamos pasadas las doce de la noche del viernes; aparcamos en zona azul y al echar lo máximo que permitía nos salió el ticket hasta casi las 11 de la mañana del sábado, que era la cuenta para desayunar tranquilamente y coger el coche para ir al Museo de las Ciencias.

     Retomando el tema del hotel, yo lo recomiendo totalmente. El personal muy atento y las instalaciones muy bien conservadas. La habitación tenía una cama doble extra-grande y una supletoria.



      En el baño teníamos todo tipo de detalles.


     Y en el escritorio nos habían dejado una carta con las entradas y todo lo que incluía la escapada.


     Teníamos el desayuno incluido y he de decir que no faltaba de nada. Era tipo bufet y había desde las típicas galletas Maria hasta el bacon, pan con jamón o fruta. Así que llenamos bien las barrigas y nos fuimos al ...

     Museo de la Ciencia ... EUREKA!


     Hay parking gratuito. Antes de entrar nos dimos una vuelta por los exteriores, viendo una exposición de edificios emblemáticos en miniatura. En la taquilla nos explicaron un poco todo lo que hay para ver y nos dieron un plano con todas las zonas que hay y los horarios de las actividades. También nos dieron la entrada para el planetario, que era a la 1:15h.

     No sabría explicaros todo lo que hay para hacer y para ver. Solo deciros que os lo recomiendo totalmente. A los niños y los no tan niños os encantará. Es un museo en el que se aprende tocando y haciendo. También deciros que podéis pasar el día entero. Si vais pasando por todas las salas, probando todas las actividades, incluso asistiendo a las explicaciones prácticas que ofrecen, tenéis para pasar horas y horas. Al final de la entrada os voy a poner un enlace a un vídeo resumen de todo el fin de semana por si queréis muestras gráficas 😉.

 
     En el mismo museo hay una cafetería para poder comer, pero cuando salimos del planetario estaba llena y como se puede entrar y salir las veces que se quiera, decidimos bajar al centro a comer de pinchos. Y luego dar un paseo por la playa de La Concha hasta ...

     El Aquarium
     
Como os digo, está al final de la playa de La Concha, pasando el muelle. Según entras tienen un hueco con taquillas normales y jaulas para cuando van grupos, a modo de consigna. Metes una moneda y te sale cuando te vas. Está genial porque dejas paraguas, abrigos y mochilas, y te ves todo el acuario mucho más relajado.

     Lo más destacado es el túnel por el que vas pasando rodeado de agua, con todos los peces a tu alrededor. Es impresionante. Por lo demás está muy bien y a los niños les encanta, pero la verdad que esperaba que fuera más grande. Aún habiendo estando un buen rato viendo toda la variedad de peces en el túnel, lo recorrimos en muy poco tiempo, o sea que nos dimos otro paseo por las calles del centro y volvimos al Museo de la Ciencia a terminar de ver y hacer lo que nos había quedado pendiente.

     Cuando acabamos, estábamos cansadísimos, así que el plan de cena fue ir a un Lidl que había cerca del museo a por algo de embutido y pan e irnos a cenar de picnic en la habitación del hotel viendo una película y a dormir. Es lo que tiene viajar con niños 😉.

     A la mañana siguiente, cogimos un autobús de línea para acercarnos al centro y aprovechar los billetes del bus turístico. En todas las ciudades que vamos procuramos usarlo. Me parece una forma rápida y descansada de conocer sus historias y lugares emblemáticos. Suelen tener varias rutas y te van explicando cada sitio por el que va pasando. Además tienen varias paradas y normalmente puedes subir y bajar en cualquier parada a lo largo del día las veces que se quieran.


     Nosotros hicimos la ruta naranja, que nos parecía la más completa y nos bajamos en la parada que quedaba más cerca del hotel, para regresar caminando por el paseo de la ría. Además había mercadillo (domingo por la mañana), o sea que se nos hizo más ameno. Y ya en el coche tomamos ruta dirección Bilbao que queda a una hora y así comíamos allí.

     No queríamos meternos en el centro, ni pasar mucho rato para que no se nos hiciera muy tarde. Paramos donde el Museo Guggenheim, pero no entramos. Nos dimos un paseo por los alrededores, viendo las figuras más emblemáticas. Y entramos en un centro comercial que está a menos de 5 minutos caminando, a comer en un McDonald. No nos gusta mucho arriesgar:  estaría abierto aún siendo domingo y habría comida que sabemos que nos gusta 😆 somos así!!




     Y hasta aquí nuestra mini escapada a San Sebastián. Espero que os haya gustado y sobre todo que os sea de ayuda. Muchas gracias por leernos y no olvides suscribirte para que te llegue un aviso a tu correo cada vez que publique una entrada. Aquí os dejo el vídeo resumen que os comenté y ... hasta la próxima!!!

     




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